Falsos "tuétanos" vegetarianos

"Los "Falsos tuétanos" son uno de los inventos más sencillos que he podido probar alguna vez pero con un sabor con mucha intensidad. Simplemente los adoro. Son suaves, tiernos, dulces, cremosos, se te deshacen en la boca, un plato del que disfrutarán tanto los veganos y los vegetarianos como los más carnívoros del mundo. " 


En la creación de hoy he decidido tener como invitado de honor al  Allium Ampeloprasum, el bien conocido como puerro.
Esta receta me lo enseñó mi amiga Celine, y es una de las recetas que lo preparo con mucho gusto, una por que me gusta muchísimo y la otra por que me hace recordar momentos muy agradables. 

La receta no puede ser más sencilla, y puede ser perfectamente tanto un entrante de un menú como una cena light. Simplemente hay que hervir los puerros y preparar una salsita en un plisplás, sin embargo, el resultado es sorprendente. Adoro estas recetas que sin tener complicación alguna te llegan al alma. 

El puerro fue considerado por las generaciones anteriores como una planta con propiedades medicinales: refuerza el sistema inmunológico, antiséptico, antibiótico natural, antibacteriano, diurético, retención de líquidos, hipertensión, reduce el colesterol, facilita las digestiones, ayuda en afecciones respiratorias (los caldos de puerro muy interesante las personas que pasan por el COVID, ¡mano de santo!). Contiene vitamina C, E, B6, , B12, una gran cantidad de fibra, hierro, calcio, fósforo, magnesio, potasio.


No se sabe con certeza de que parte del mundo proviene el puerro, pero si se sabe que hace mas de 4000 años se consumía en Mesopotamia, Turquía, Grecia o Egipto extendiéndose mas tarde al Oriente Próximo, N de África, Islas Británicas y Europa, de donde parte a mano de los conquistadores hacia el continente americano. 

El puerro era muy amado por el emperador Nerón que tenia una afición al canto y quería aclarar su voz, por eso lo consumía al diario en sopas o con aceite. 


Y qué me dices del escudo de Gales que lleva al puerro a un escalón muy alto. 
Cuenta la historia que el San David, por los años 500, tuvo que enfrentarse a los ingleses en una batalla y para distinguir sus tropas de las del enemigo les puso en la armadura de sus soldados un puerro, ya que es lo que había sembrado en aquella zona. Cabe decir que ganó la batalla, aunque seguramente aquel año hubo escasez de puerros. 


INGREDIENTES:
  • 3 puerros, solo la parte blanca
  • zumo y ralladura de 1 lima o limón
  • 100 ml aceite 
  • 1-2 dientes de ajo 
  • eneldo fresco, seco o congelado
  • sal


PREPARACION:
  • Cortamos los puerros en dos partes y quitamos las primeras dos capas, que son más fibrosas. Nos quedarán 6 trozos. 
  • En un cazo con agua hirviendo con un poco de sal, ponemos a cocinar los puerros unos 20 minutos. 
  • Mientras prepararemos la salsa como si de una vinagreta se tratara. 
  • Pasamos por un rallador el ajo.
  • Rallamos la piel de lima o limón y juntamos con el ajo.
  • Añadimos el aceite poco a poco para emulsionar un poco.
  • Estrujamos el zumo de lima o limón, añadimos el eneldo picado, la sal y mezclamos todo. 
  • Sacamos los puerros del agua y con cuidado los cortamos longitudinal en dos partes.
  • Ponemos en el plato con el corte hacia arriba para que la salsa pueda penetrar y servimos antes de que se enfríen. 
  • Aunque estén calientes, la salsa les hará bajar de temperatura en seguida. Cuando se comen deben de estar templados.
  • Decoramos con unas ramitas de eneldo y unos gajos de limón.


¡Que lo disfruten!


No hay comentarios:

Con la tecnología de Blogger.